La práctica del mindfulness ayuda a niños y personas adultas a tomar conciencia de su cuerpo, sus pensamientos o su entorno.

El Mindfulness o Atención Plena es una práctica basada en la meditación. Implica prestar atención a los pensamientos, emociones, sensaciones corporales y al ambiente circundante, sin juzgar, con una actitud de apertura y aceptación.

¿A QUIÉN VA DIRIGIDO?

Cualquier persona de cualquier edad puede beneficiarse de saber cómo podemos relacionarnos con nuestros pensamientos y emociones de una manera más sabia.

El curso es principalmente experiencial, enseñando a la persona la práctica del Mindfulness como instrumento de mejora de la salud física y el desarrollo emocional.

Ayudar a desarrollar una experiencia personal profunda de Mindfulness y a construir los cimientos de una práctica personal sostenida, con el fin de aplicarla en la vida cotidiana y todos los ámbitos de la persona.

Realizar prácticas de Mindfulness ayuda a niños, adolescentes y personas adultas a:

    • Incrementar la capacidad de concentración y atención.
    • Mejorar la forma en la que gestionamos las emociones en lo cotidiano y ante situaciones complejas.
    • Desarrollar el cuidado y amabilidad hacia sí mismo y hacia los demás
    • Mejorar las competencias sociales y emocionales:
      • la paciencia
      • la empatía
      • la alegría por el bienestar de los demás
      • el cuidado de uno mismo.
    • Reducir el estrés y la ansiedad