Finalizamos el curso muy orgullosas del esfuerzo que han realizado nuestros chicos y chicas durante los talleres. Esto no habría sido posible sin la implicación de las familias por reforzar lo que trabajamos en las sesiones y, en algunos casos, también gracias a la coordinación y cooperación de los profesionales de sanidad y educación.

Un año más, nos sentimos satisfechas de haber contribuido a que niñ@s y jóvenes desarrollen nuevas formas de relacionarse, de expresar y reconocer emociones y de que, poco a poco, vayan construyendo un concepto positivo de sí mismos.

Cuando nos reunimos con las familias la primera vez, siempre dejamos claro que aprender habilidades sociales y emocionales de forma consciente es una carrera de fondo. Sin prisa pero sin pausa. Todo suma, los talleres, el refuerzo desde casa, las quedadas con compañeros del cole, los deportes o actividades extraescolares.

Es muy gratificante observar cómo en las primeras sesiones algunos chicos y chicas se muestran temerosos, tímidos, expectantes… y como, a medida que va pasando el tiempo, van estrechando el vínculo de amistad entre ellos y vienen a Hábiles como si fuera su segunda casa.

Cada alumno enriquece al grupo con su personalidad, su carácter, sus puntos fuertes y débiles. Uno de los objetivos comunes es que consigan ajustar sus conductas a las distintas situaciones que se va encontrando en su vida cotidiana.

En muchos casos se inician nuevas amistades y desarrollan el sentido de pertenencia a un grupo. Hábiles es un punto de partida para socializar y a nosotras nos encanta ser testigos de esas relaciones tan especiales que surgen entre ellos.

En Hábiles tenemos claro nuestro objetivo y hemos desarrollado un método basado en la terapia grupal combinado con una atención personalizada, así que seguimos nuestra propia metodología que aplicamos con éxito desde hace 10 años.

Durante parte del mes de julio hemos estado concretando la programación del próximo curso y elaborando el material que utilizaremos.

Para trabajar las habilidades sociales e inteligencia emocional no hay fórmulas mágicas; ocurrencia, creatividad y hacer que l@s alumn@s disfruten aprendiendo a través del juego, dinámicas divertidas, retos, debates, etc.

Ahora es momento de disfrutar de las vacaciones y venir con las energías renovadas para poder dar lo mejor de nosotras mismas el próximo curso.

¡Felices vacaciones!